Dado que el crecimiento mundial se está enfriando y que la incertidumbre se agudiza, los países deben prepararse para la posibilidad de una desaceleración, por lo que es preciso controlar los niveles de deuda, desplazar el gasto hacia inversiones y poner freno a la corrupción, indicaron referentes del FMI, en la presentación del informe “Monitor fiscal”. El organismo rebajó su proyección de crecimiento para nuestro país en 3,5%.